Charlemos Sobre...La Oración Nos Impulsa a la Misión

Homilía del XXIX Domingo Ordinario, 20 de Octubre 2019.

Lecturas del Día:

Primera Lectura: Éxodo 17:8-13
Salmo Responsorial: Salmo 121:1-8
Segunda Lectura: II Timoteo 3:14--4:2

Evangelio del Día:

Lucas 18:1-8

1 Les decía una parábola para inculcarles que era preciso orar siempre sin desfallecer.
2 «Había un juez en una ciudad, que ni temía a Dios ni respetaba a los hombres.
3 Había en aquella ciudad una viuda que, acudiendo a él, le dijo: "¡Hazme justicia contra mi adversario!"
4 Durante mucho tiempo no quiso, pero después se dijo a sí mismo: "Aunque no temo a Dios ni respeto a los hombres,
5 como esta viuda me causa molestias, le voy a hacer justicia para que no venga continuamente a importunarme."»
6 Dijo, pues, el Señor: «Oíd lo que dice el juez injusto;
7 y Dios, ¿no hará justicia a sus elegidos, que están clamando a él día y noche, y les hace esperar?
8 Os digo que les hará justicia pronto. Pero, cuando el Hijo del hombre venga, ¿encontrará la fe sobre la tierra?»

Tomado de: http://www.ewtn.com/espanol/lecturas-del-d%EDa.asp?date=2019-10-20


Homilía del Padre Jaime Rivera B.




Preguntas:
- ¿Que nos dice las lecturas que escúchamos de la oración?
- ¿Que le dice Pablo a Timoteo sobre la escritura?
- ¿Que dice el Vaticano II sobre la misión ?

Tarea de la Semana:

Sacar un buen tiempo para hacer oración, perseverar, leer y reflexionar con la sagrada escritura.
Revisar y comprometerme  hacer algo ??? estoy haciendo apostolado en mi parcela. 
Usted se siente empoderado de ser bautizado... 

Oración:

Señor, hoy me dirijo a ti agradeciéndote por tu infinito amor. También quiero pedirte que me des un corazón orante, que día y noche quiera estar unido a ti. Gracias por escuchar mis plegarias, y por darme la oportunidad de saber que estás presente en mi vida por medio de la oración. ayudame a cada día a empoderarme de ser un buen cristiano Amén.


Oh Santa Teresita del Niño Jesús, que has sido justamente proclamada Patrona de las Misiones de todo el mundo: acuérdate de los ardentísimos deseos de mostrarte, cuando vivías en la tierra, de querer plantar la Cruz de Jesucristo en todas las naciones, y anunciar el Evangelio hasta la consumación de los siglos. Te suplicamos que ayudes, según tu promesa, a los sacerdotes, a los misioneros y a toda la Iglesia. Así sea.

Santa Teresita del Niño Jesús ¡Ruega por nosotros!