Lecturas del Día:
Primera Lectura: Isaías 6:1-2, 3-8
Salmo Responsorial: Salmo 138:1-5, 7-8
Segunda Lectura: I Corintios 15:1-11
Evangelio del Día:
Lucas 5:1-11
1 Estaba él a la orilla del lago Genesaret y la gente se agolpaba sobre él para oír la Palabra de Dios,
2 cuando vio dos barcas que estaban a la orilla del lago. Los pescadores habían bajado de ellas, y lavaban las redes.
3 Subiendo a una de las barcas, que era de Simón, le rogó que se alejara un poco de tierra; y, sentándose, enseñaba desde la barca a la muchedumbre.
4 Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: «Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.»
5 Simón le respondió: «Maestro, hemos estado bregando toda la noche y no hemos pescado nada; pero, en tu palabra, echaré las redes.»
6 Y, haciéndolo así, pescaron gran cantidad de peces, de modo que las redes amenazaban romperse.
7 Hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que vinieran en su ayuda. Vinieron, pues, y llenaron tanto las dos barcas que casi se hundían.
8 Al verlo Simón Pedro, cayó a las rodillas de Jesús, diciendo: «Aléjate de mí, Señor, que soy un hombre pecador.»
9 Pues el asombro se había apoderado de él y de cuantos con él estaban, a causa de los peces que habían pescado.
10 Y lo mismo de Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Jesús dijo a Simón: «No temas. Desde ahora serás pescador de hombres.»
11 Llevaron a tierra las barcas y, dejándolo todo, le siguieron.
Primera Lectura: Isaías 6:1-2, 3-8
Salmo Responsorial: Salmo 138:1-5, 7-8
Segunda Lectura: I Corintios 15:1-11
Evangelio del Día:
Lucas 5:1-11
1 Estaba él a la orilla del lago Genesaret y la gente se agolpaba sobre él para oír la Palabra de Dios,
2 cuando vio dos barcas que estaban a la orilla del lago. Los pescadores habían bajado de ellas, y lavaban las redes.
3 Subiendo a una de las barcas, que era de Simón, le rogó que se alejara un poco de tierra; y, sentándose, enseñaba desde la barca a la muchedumbre.
4 Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: «Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.»
5 Simón le respondió: «Maestro, hemos estado bregando toda la noche y no hemos pescado nada; pero, en tu palabra, echaré las redes.»
6 Y, haciéndolo así, pescaron gran cantidad de peces, de modo que las redes amenazaban romperse.
7 Hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que vinieran en su ayuda. Vinieron, pues, y llenaron tanto las dos barcas que casi se hundían.
8 Al verlo Simón Pedro, cayó a las rodillas de Jesús, diciendo: «Aléjate de mí, Señor, que soy un hombre pecador.»
9 Pues el asombro se había apoderado de él y de cuantos con él estaban, a causa de los peces que habían pescado.
10 Y lo mismo de Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Jesús dijo a Simón: «No temas. Desde ahora serás pescador de hombres.»
11 Llevaron a tierra las barcas y, dejándolo todo, le siguieron.
Tomado de : http://www.ewtn.com/espanol/lecturas-del-d%EDa.asp?date=2016-02-07
Homilía del Pbro. Jaime Rivera Bohórquez
Preguntas:
- ¿Qué significa que Jesús haya salido de la sinagoga hacia el mar?
- ¿Qué descubre Pedro en su acercamiento a Jesús?
- ¿Qué les regala Jesús a sus discípulos?
- ¿Qué diferencia existe entre el creyente y el no creyente?
Tarea de la Semana:
Reflexionar si Jesús ha sido la fuente de los propósitos de mi vida, o si he dejado que mis propios intereses predominen sobre los del Señor. ¿Se cuál es el propósito de mi vida?
Oración:
Señor, hoy quiero entregarme a ti, diciéndote que confío en tu palabra y en tus promesas. Tú llamaste a los discípulos, y hoy me llamas a mí, dándole un nuevo sentido a mi vida. Permíteme soñar con tus propósitos, para que pueda construir tu Reino de paz y justicia cada día. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.